jueves, 1 de febrero de 2018

galletas-bitcoin
No me crean loco, no puedo y si podría tampoco daría explicaciones de cómo blanquear Bitcoins porque… no lo sé, aunque lo que sí se es que esa es la gran pregunta. Pongamos el ejemplo real de un estudiante que le “cuenteó” a su padre para que gaste ar$3000 más en la PC que se estaba armando para estudiar ingeniería y que mentía con excusas para zafar la abultada factura de luz por meses y hoy se encuentra que tiene el dinero para comprarse un, por ejemplo, Volkswagen Golf GTI. Con las – completamente entendibles – trabas que tiene el fisco para evitar blanqueo de dinero las cosas se complican porque… ¿cuantos realmente entienden el Bitcoin?

Hoy hablaba con mis viejos y les trataba de explicar lo que era “esa moneda de la cual escucharon en la radio” y les costó muchísimo entender. Tuve que remontarme al dólar, al concepto de respaldo y varias cosas más como para que comiencen a entenderme, entonces, ¿cómo le explico al fisco que gracias a una PC con 2 Radeon 5850 “generé” monedas virtuales que luego cambiaron a u$s a pesos? Ahí te quiero ver papito, sentado junto a los agentes de la Administración Federal de Ingresos intentando explicarle “cómo de la nada hiciste tal montaña de billetes”. Olvidate, es muy dificil que lo vayan a entender, es un concepto tan innovador que seguramente lleve muchos años incorporar a la sociedad en su conjunto.

Me despido con un texto que descubrí gracias a Abby Ferrari, es de un tal Cesar Pailacura y la verdad que pinta muy bien las esperanzas puestas por mucha gente para que la moneda virtual termine de triunfar.

“Vos que me conocés al menos por este medio, ya sabés que hace bastante tiempo que insisto, sugiero, recomiendo, defiendo al bitcoin.

Tal vez, si sólo sentías curiosidad cuando yo o alguien te recomendaba comprar, hoy te dirás: “Si le hubiera hecho caso”.

No es tarde, todavía subirá y mucho más.

Y eso no importa mucho. En serio. Probablemente pensarás que si tuvieras unos pesos, comprarías bitcoins, o un poquito de uno.

Igual, no importa mucho. Nunca, desde hoy, será tarde para entrar en el bitcoin. Nunca. NUNCA VA A SER TARDE.

Esta moneda, cuando la hagamos triunfar, nos va a cambiar para siempre la historia.

Siempre tenderá a ser más valiosa, porque no sólo será contra más y más bienes, sino que favorecerá notablemente el ahorro y la inversión.

No importa mucho si no tenés bitcoins, si los vendiste a todos, si no podés comprarlos.

Cuando el bitcoin triunfe, todo tu trabajo tendrá mucho más valor, nadie te robará con el impuesto inflacionario, no podrán los gobiernos arruinar emprendimientos, destruir poder adquisitivo, licuar ahorros, generar incertidumbre monetaria.

Si puedo recomendarte algo, es que aprendas poco a poco sobre cómo prepararte para aceptar y entregar bitcoins. Para que podamos cambiar el mundo, con sólo ése conocimiento será suficiente.

Feliz futuro.

Como verán, además de haber hecho a mucha gente rica, los Bitcoins pasaron de ser algo parecido al “humo” para la mayoría y la “moneda de intercambio para comprar drogas y armas en la deep Web” a algo real, tangible y que tiene la posibilidad de revolucionar el sistema monetario internacional. De hecho el precio que se maneja actualmente y las noticias acerca del visto bueno en USA y China para el uso de la moneda van mucho de la mano.

Felicidades para aquellos que apostaron por el Bitcoin.

En 2013, y hoy, 3 años después, también.

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